¡Dame una W! ¡Dame una E! ¡Dame una R! ¡Dame una T!

Ha demostrado que no es capaz de leerse ningún informe y prefiere montarse su historia en la cabeza. Entre todos los españoles estamos pagando una nube de asesores que lo único que hace es dar soluciones que no se corresponden con los verdaderos problemas en la Educación. Según un informe presentado hace días sólo 1 de cada 3 profesores de Universidad investiga. Es una realidad que los profesores universitarios conocemos. Todos tenemos compañeros hastiados, acomodados o que el sistema en su época no les empujó a ser Doctores y ahora les coge viejos. 

Para resolver este problema han distinguido entre PDI (personal docente e investigador) con mayor carga docente y con mayor carga investigadora. Hasta ahí bien. El problema llega con el criterio que se aplica para distinguir entre unos y otros: los sexenios. Los sexenios son un complemento retributivo que se otorga por una actividad investigadora suficiente según unos criterios variables que dependen de los antojos de la entidad evaluadora de turno. Hace unos años con haber presentado algo en un congreso cada 6 años te lo daban y ahora piden millones de revistas que nos empujan a publicar cualquier cosa en tiempo récord. Como todos los baremos establecidos en los últimos tiempos no refleja la calidad real de la investigación. Pero lo que es más divertido: está reservado a funcionarios. Más de la mitad de la plantilla de mi departamento es personal laboral con una actividad investigadora frenética en la carrera por obtener la siguiente acreditación. Pues bien, ninguno investiga desde la perspectiva del Gobierno. Y hay muchísimos funcionarios que tras obtener un sexenio con CVs mucho más cortitos que mucha gente joven y con ganas, verán reducida su docencia mientras a los que estamos peleando por sacar a este país de la mierda en la que nos han metido nos aumentan la carga docente.

Seguramente el objetivo final sea bien sencillo: más carga per cápita, menos personal necesario y por tanto despidos. Pero creo que también hay un maquillaje de números detrás de esto. Si ahora el número de horas de investigación per cápita se reduce, las cifras de investigación del país automáticamente mejoran. Es como la productividad española, que ha mejorado porque en la división (PIB/trabajadores) el número de trabajadores se ha visto reducido. En cualquier caso, la han cagado.

En Andalucía ya existe un censo de la actividad investigadora en la que se tienen detectados más que de sobra lo que denominan doctores muertos. Y no se usan para nada los sexenios. Espero que al menos a nivel autonómico se utilicen estos datos para hacer una distinción real de quién trabaja y quién no. Porque como en las reformas sigan atacando a los que trabajamos y nos maltraten mientras que los que no trabajan siguen en lo suyo, aquí las antorchas van a salir a la calle más bien pronto que tarde.

Señor Wert, primer ministro de educación que destaca por su falta de educación y respeto, no se equivoque de enemigo. Porque como siga así no nos vamos a levantar para decirle "Sí capitán, mi capitán". Eso que se lo diga su señora madre.

23 abril, 2012

Posted In: Desvaríos

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